La OIT, Organización Internacional del Trabajo, anunció que 2022 será un año complejo en la recuperación del empleo. De acuerdo con el organismo, durante el período se prevé un déficit de horas laborales equivalentes a 52 millones de puestos de trabajo a tiempo completo a nivel mundial, todo esto en comparación con el cuarto trimestre de 2019, es decir previo a la pandemia.

Andrea Gamboa, Gerente de People & Culture de ManpowerGroup Chile, afirma según el informe “el desempleo a nivel global se mantendrá en los niveles que tenía anteriores al coronavirus hasta el 2023. Esperamos que durante este año se sitúe en una cifra de 207 millones de personas desocupadas, mayor a lo registrado en 2019 cuando se logró la cifra de 189 personas sin trabajo”.

Los patrones de recuperación, indica el reporte, serán disimiles. Mientras que Europa y América del Norte se espera tengan números más alentadores, en los casos de Asia, América Latina y El Caribe tendrán efectos negativos. No obstante, los países que poseen ingresos más altos y economías más robustas, no se verán tan golpeados: “Esto es alentador para Chile, economía que se ha mostrado sólida dentro de la región por 20 años”, comenta la ejecutiva.

Con este escenario y dado el aumento de número de casos en el país, Gamboa indica que existen muchas empresas que están optando por trasladar a trabajadores bajo la modalidad de teletrabajo por siempre. Así, la especialista señala algunas recomendaciones para las instituciones privadas y públicas que estén optando por dicha figura:

1.- “Mantener el equilibrio vida laboral – vida personal ha sido uno de los desafíos más complejos que ha tenido el mundo del trabajo como consecuencia de la pandemia. El separar las responsabilidades propias de nuestro oficio, con aquellas que se sumaron para mujeres y hombres al estar al cuidado de su salud y la de su familia, así como atendiendo a niños, niñas y adultos mayores, ha conllevado el aumento en los índices de estrés, ansiedad e incertidumbre, los cuales hoy en día impactan cada vez más a la salud mental. Es muy importante mantener un horario de trabajo y compatibilizarlo con el horario personal del trabajador, conversarlo, para que de esta forma sienta la empatía y comprensión de la organización”, comenta.

2.- “Las áreas de Recursos Humanos, particularmente, -señala la ejecutiva- tuvieron que replantearse sus estrategias de Employee Experience, para estar más cerca que nunca de sus colaboradores, incluso en contextos virtuales. Iniciativas como activar sesiones de pausas activas para, en conjunto, hacer un break de la rutina diaria, así como programar espacios de conversación para compartir experiencias, preocupaciones e incluso algunas anécdotas que nos han ayudado a sobrellevar la difícil situación sanitaria a nivel global; todo esto desde un foco en el cual los líderes debían comprometerse para estar codo a codo con sus equipos, y salir juntos hacia adelante. Esto se debe mantener. Los líderes no pueden abandonar a sus grupos en el contexto actual y deben potenciar esos roles para afiatar equipos”.

3.- “El teletrabajo llegó para quedarse, y con él la continuidad de prácticas de bienestar, conversación y mindfulness que hoy en día complementan nuestra rutina laboral. La realidad híbrida en la que vivimos nos invita a ser más autónomos en cómo y dónde desarrollamos nuestras funciones, mientras seguimos realizando actividades complementarias que impactan positivamente en nuestra calidad de vida. Trabajar por objetivos diarios, en un horario acordado previamente y con roles súper claros de cada puesto de trabajo, puede brindar tranquilidad en momentos de tempestad”, indica.