Marzo 25, 2019

Aromaterapia y cromoterapia: cómo influyen en nuestra felicidad

En el tema de la felicidad hay que mencionar diferentes técnicas que pueden influir en el estado de ánimo de las personas. Unas de las técnicas más comunes es la terapia de los sentidos, la aromaterapia y cromoterapia son técnicas que influyen positivamente en el organismo mediante la estimulación adecuada de los sentidos.

La aromaterapia se define como una acción terapéutica de sanación que utiliza aceites esenciales y otros productos para activar ciertas sensaciones en las personas a través del olfato. Los aceites esenciales de donde que se extraen desde las plantas, flores o frutas, se usan para elaborar cremas y productos cosméticos en general. Mientras que la cromoterapia se busca la relajación mediante la apreciación de colores y luces.

Probablemente, lo que más se utiliza es la aromaterapia. Baños de tina, masajes y otros tratamientos donde se puede apreciar esta técnica bastante común.

La cosmetóloga de The Body Shop, Alejandra Abarca, explica que “mediante estas técnicas utilizadas como relajación, también se pueden mezclar en productos cosméticos que entregan una experiencia placentera de olores y aromas, activando diferentes sensaciones que controlan las emociones y estimulan la felicidad”.

En relación a la aromaterapia, se encuentra un listado con una diversidad de aromas y su efecto en el cuerpo y mente de las personas para poner a prueba los sentidos:

  • Menta: ayuda a la concentración, despeja los pensamientos.
  • Rosas: conecta a la persona con su amor propio, produce tranquilidad. En este caso, The Body Shop posee una delicada fragancia floral con aroma primaveral de rosa de marruecos.
  • Naranja: es un antidepresivo natural, levanta el ánimo y estimula la espiritualidad.
  • Limón: potencia la autoconfianza, disminuye el agotamiento y estrés.
  • Jazmín: relaja e induce el sueño y buen descanso. Calma trastornos nerviosos, espasmos. The Body Shop, posee una fragancia de aroma veraniego de jazmín de la línea Japanese Cherry Blossom.
  • Lavanda: es sedante, calma la histeria, estabiliza las emociones en desorden.
  • Almendra: alivia malestares y dolores, ya que estimula producción natural de serotonina.
  • Canela: vigorizante y anti fatiga. Controla la ira.
  • Jengibre: es estimulante, trata los mareos. Activa la circulación y el metabolismo.
  • Pimienta: trata trastornos de ansiedad y respiratorios.
  • Mandarina: calmante, sedante.
  • Manzanilla: anti irritante, alivia el insomnio.
  • Cedrón: eleva el espíritu.
  • Árbol de té: refrescante, vigorizante. Disminuye la fatiga y cansancio mental.
  • Albahaca: alivia migrañas, dolores de cabeza. También es desinfectante.
  • Bergamota: refrescante, antidepresivo y anti tensional.
  • Patchouli: antidepresivo y afrodisiaco.
  • Romero: estimula el sistema nervioso central y disminuye la pérdida de memoria.
  • Vainilla: calma la tristeza.
  • Ciprés: frustración y perdida de voluntad.
  • Pomelo: energizante y anti fatiga.
  • Pino: refrescante, vigorizante
  • Miel: afrodisiaca y anti estrés.

La técnica de la cromoterapia, a través de la elección y ubicación de ciertos colores, logra influir en el subconsciente, pudiendo utilizarse como terapia. Por otro lado, diversos estudios han demostrado que la cromoterapia tiene efectos positivos en personas que padecen de estrés y depresión.

Al momento de realizar esta terapia, es necesario elegir un color teniendo en cuenta la personalidad de cada persona, para luego saber cuáles son las necesidades o padecimientos que se busca tratar. Dentro de los colores y sus beneficios se encuentran:

  • Amarillo: es el color de la alegría, estimula la actividad cerebral y la creatividad. Tiene un efecto antidepresivo.
  • Naranjo: es el color del ánimo y la energía. Favorece la comunicación, sociabilización y diversión.
  • Rojo: es un color un color excitante, estimulante, alterativo. Se asocia a la pasión y seducción.
  • Verde: éste color induce a la calma, vitalidad, relajación y paz. Ayuda a disminuir la tensión y el estrés.
  • Azul: ayuda a la extraversión, por lo que es beneficioso en situaciones de estrés y nerviosismo.
  • Negro: baja la energía, ideal para personas hiperactivas, volátiles y dispersas.
  • Morado: eleva la espiritualidad, la conexión con el yo interior.
  • Celeste: brinda armonía, tranquilidad y arte. Estimula la imaginación y creatividad.
  • Rosado: potencia placeres, el amor, la sensualidad.
  • Blanco: paz, sensibilidad, calma y sensaciones positivas. Se asocia a la pureza, a la luz.

De esta forma, se puede visualizar la interrelación de las emociones y olores mediante la aromaterapia y cromoterapia que actúan en la parte primitiva del cerebro, donde sus efectos pueden mejorar y aumentar el bienestar de las personas.

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