La cercanía del verano hace que tu huerta produzca más vegetales que los que puedes consumir. La buena noticia es que ahora no necesitas venderlos ni en el peor de los casos botarlos. Existen productos al alcance de todos, para conservar y almacenar esta abundancia de verduras, con tecnologías que permiten sacar el aire de envases para almacenarlos, evitando la oxidación y descomposición de los alimentos y así preservar la frescura de las verduras y frutas de la huerta por mucho más tiempo.
Sella al vacío para refrigerar y congelar la producción de tu huerta y así mantenla tan fresca como el día en que fue cosechada. Acá te damos algunas ideas para aprovecharlas al máximo:
Hojas de lechuga:
Puedes comenzar a arrancar hojas verdes de tu lechuga desde mediados de primavera, no es necesario que la saques entera de la tierra. Pero, no olvides sacar tu lechuga entera antes de que se suba (empiece a crecer verticalmente) que es cuando se prepara para semillar. Y recuerda, ¡las hojas de lechuga no son solo para ensaladas! Puedes usarlas como envolturas en lugar de tortillas o picarlas para hacer tomates rellenos, sin mencionar que las necesitarás para unas buenas hamburguesas en pan.
Rábanos:
Puedes plantar almácigos de rábanos casi en cualquier momento. Son un complemento perfecto para un pebre, ensalada de repollo, ensalada de papas o para una sopa de invierno.
Arvejas y porotos verdes:
Si los recolectas tiernos puedes hervirlos o para saltearlos con un poco de soja y jengibre para un plato rápido.
Antes de sellar al vacío estas verduras, para congelarlas es imprescindible blanquearlas primero, es decir, cocer las verduras en agua o vapor. Esto es crucial para garantizar que los alimentos permanezcan frescos cuando se congelan, ya que la acción inhibe las enzimas que pueden causar decoloración o pérdida de sabor. Además, el proceso limpia y suaviza los vegetales, haciéndolos más fáciles de almacenar.
Para blanquear las arvejas o porotos verdes debes hervirlos de 1 a 2 minutos y luego pasarlos por agua fría para cortar la cocción. Envásalos al vacío y durarán congelados hasta por 2 o 3 años.
Espinacas:
Son ricas para agregar a ensaladas, pero también intenta saltearlas con un poco de mantequilla para un acompañamiento rápido o prepara espinacas con crema y cebollas fritas para acompañar tu asado.
Incluso séllala al vacío con frutas para que congeles un mix de exquisitos batidos. Puedes hacer porciones diarias de batidos saludables.
Brócoli:
Ideal para salteados y ensaladas. Intenta asarlos al horno con un poco de ajo, aceite de oliva y limón.
Si quieres congelar el brócoli, así como repollo, coliflor o coles de bruselas, es importante blanquearlos para que no emitan gases durante el almacenamiento. Para blanquear el brócoli, así como repollo, coliflor o coles de Bruselas, debes hervirlos de 3 a 5 minutos y luego pásalos por agua fría para cortar la cocción.
Envásalos al vacío y te durarán congelados hasta por 2 o 3 años.
Betarraga y Acelgas:
Una rica idea para aprovechar tu cosecha de betarraga es rostizarlas para ensaladas con un poco de queso de cabra y kale. Esta receta también funciona si reemplazas el kale por acelgas o espinacas. También son una gran combinación con papas asadas.
Incluso se puede sellar al vacío con frutas para congelar un mix de exquisitos batidos. Con esto puedes hacer porciones diarias de batidos saludables.
Nabos:
Es una excelente verdura que ha comenzado a aparecer en nuestras huertas. Los nabos en puré con un poco de mantequilla son una alternativa espectacular al puré de papas.
Todas estas son saludables y ricas soluciones para hacerse cargo hoy del desperdicio de alimentos, además de ahorrar dinero y planificar los tiempos. Por otra parte, el sellado al vacío permite alargar la vida de tus alimentos hasta 5 veces sin importar que sean líquidos o sólidos, ya que elimina el aire y con ello los efectos del oxígeno. Descubre más consejos, recetas y opciones para sumarte a esta cruzada en www.foodsaver.cl
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