Las temperaturas récord que se proyectan para este verano traen desafíos significativos para el envío de productos sensibles a la temperatura. Ante esta realidad, es esencial adoptar medidas para garantizar su preservación, que van desde el almacenamiento hasta su transporte.

Nicolas Kunstmann, co-fundador del software logístico Drivin, explica que para mantener la cadena de frío, es crucial contar con instalaciones de almacenamiento refrigerado y vehículos de transporte con control de temperatura.

“El control de temperatura es la base de la logística para productos sensibles. Desde el almacenamiento hasta la entrega, cada fase debe estar perfectamente regulada, para lo cual existen tecnologías que alertan cuando el espacio no está en las condiciones adecuadas”, explica Kunstmann.

Asimismo, el experto recomienda  utilizar un buen embalaje que cumpla un efecto de aislamiento, así como desarrollar planes de contingencia en caso de imprevistos.

En materia de tecnología, también existen sensores y dispositivos IoT, que permiten un monitoreo constante de la temperatura e incluso realizar ajustes remotos.

Otra buena opción es contar con fuentes de energía de respaldo, para mantener la temperatura en todo momento cuando se cuenta con un sistema de refrigeración en el vehículo o centro de almacenaje, así como también es clave tener apoyo tecnológico para ser lo más eficiente posible en las rutas

“Para casi todo aquello existen software, que pueden ser una tremenda ayuda para superar los desafíos logísticos estacionales”, cierra Kunstmann.