Los “cinco mandamientos” para evitar la quiebra de una pyme en estos tiempos difíciles
Los retiros de los fondos previsionales, las reprogramaciones de créditos bancarios y las ayudas fiscales derivaron en una alta liquidez en el país. Esto ha provocado una disminución en las empresas que se declaran en quiebra, bajando en un 36% durante el primer trimestre de este año.
Sin embargo, la elevada inflación, las alzas de tasas y la desaceleración de la economía tienen muy preocupados a los empresarios, sobre todo cuando una de las últimas estadísticas oficiales muestra que el 40% de las pequeñas y medianas empresas mueren antes del tercer año. Es por esto que los dueños de pymes son los más angustiados, dado el volumen de sus negocios.
“Las empresas quiebran por flujo y no por rentabilidad”, explica de entrada Manuel Concha, CEO de Kame ERP, sistema de gestión financiera-contable para pymes que ya tiene más de 6.000 pymes como clientes. “En Chile existen softwares que sólo cobran, sólo facturan, sólo procesan las remuneraciones, etc. La lógica de un sistema ERP es que integra todas las áreas de la administración en un solo lugar, siempre desde la perspectiva financiera y contable, con el objetivo de generar los Estados Financieros y poder informar en simple si el negocio gana o pierde dinero. Para ello se requieren todas las variables que los afectan, tales como las remuneraciones, la facturación electrónica, el inventario, la producción, las importaciones, la cobranza, el flujo de caja, etc.”, agrega.
Más allá de la tecnología, el cofundador del ascendente ERP chileno entrega sus consejos para evitar la liquidación de una compañía producto de sus deudas:
1) Establecer y proyectar tu capacidad financiera
Debes conocer las posibilidades que tendrás para cubrir pagos, para invertir en el corto y largo plazo, conocer tu punto de equilibrio o, en otras palabras, saber cuánto es el mínimo que necesitas vender y también recaudar para cubrir los costos fijos, e idealmente tener planes de contingencia si no se logran los objetivos comerciales, por ejemplo: tener líneas de capital de trabajo bancarias disponibles para evitar tener que recurrir a otras fuentes de financiamiento más costosas.
2) Un plan claro ilumina el camino
Generalmente, los emprendimientos surgen rodeados de mucho entusiasmo y no tanta planificación, con el clásico “ahí vamos viendo”. Sin embargo, antes de empezar, es esencial tener presentes los datos clave para lanzarse a un negocio específico, idealmente con el mayor detalle posible, por ejemplo: en el caso de que se comercialicen productos, es muy útil realzar el presupuesto con los valores y cantidades, no sólo con el monto de la venta total. De esta forma, se van a poder detectar mucho más fácil las posibles desviaciones del plan.
3) No te olvides de los impuestos
Se debe considerar el pago de los impuestos como algo necesario para que el negocio funcione, sobre todo si la empresa es afecta a IVA, porque todos los meses se debe contar con los flujos necesarios para el pago de dicho impuesto. Si bien el IVA puede estar considerado en el precio de los productos, la pregunta es: ¿La empresa está preparada para pagar este impuesto si los clientes no han pagado? Además, en términos generales y simples, la empresa anualmente pagará el 27% de la utilidad (ventas menos costos y gastos) obtenida el año anterior. Más aún si por algún motivo se retrasa el pago, se deberá pagar el impuesto más multas e intereses.
4) No te la puedes con todo
Uno de los grandes errores que cometen los emprendedores es creer que se la pueden solos contra todas las situaciones que se presenten. Por el contrario, las empresas que logran el éxito requieren de buenos socios y/o equipos de trabajo, dispuestos a apoyarse en los malos momentos y a mantener los pies sobre la tierra cuando las cosas van bien. Asimismo, también deben saber aprovechar las oportunidades que se presenten en el mercado.
5) Utiliza la tecnología
La utilización de la tecnología aumenta exponencialmente la productividad y es uno de los factores más relevantes en el contexto empresarial, ya que tiene la capacidad de aportar en muchos ámbitos y marcar la diferencia con la competencia. Además, la tecnología tiene la característica de hacerse cada vez más accesible o bajar sus precios, con lo que las pymes también pueden tener acceso. Así como el uso de tecnología para mejorar los procesos de la empresa es muy útil, también se puede utilizar para responder de forma inmediata, idealmente en línea, preguntas clave del negocio tales como: ¿Gano o pierdo dinero? ¿Cuál producto es más rentable? ¿Quién es el mejor vendedor? ¿Cuál es la línea de negocio con mayor utilidad? ¿Cuánto me deben los clientes? Etc. Hoy en día no gana el pez más grande, sino el que se mueve más rápido. Y para ello se necesita información de calidad, ordenada y de fácil acceso.
Agregar comentario