Por Francisco González, gerente general de Vertical Hunter – www.verticalhunter.cl
Viendo el último partido de Chile frente a Argentina, por la Copa América que se desarrolla en EE.UU., vimos a un Claudio Bravo, de 41 años, sin club, algo lesionado- dado un vendaje que llevaba en su rodilla- y con poco fútbol en los últimos meses.
Terminado el partido, donde fuimos derrotados por la cuenta mínima, nuestro portero y capitán de la Roja fue elegido el mejor jugador del encuentro deportivo. Jugando contra el actual campeón del mundo y actual campeón de América, con jugadores de la elite del futbol, enfrentando tal vez al mejor jugador de la historia como es Lionel Messi… finalmente el jugador “longevo” de Chile y destacado arquero se convierte en la estrella de dicho match.
Si llevamos esto a la realidad en el mundo laboral, y a Chile específicamente, vemos que la población sobre 50 años está prácticamente descartada para muchos de los cargos disponibles, con una población que envejece y una proyección de vida que aumenta, lo que implica que en los próximos años tendremos una población cada vez más cesante, a causa de la edad.
¡Cómo son las cosas de la vida! En una actividad de deporte de alta exigencia, el mejor jugador del partido fue el que tiene más años, es decir, el de más experiencia, el que apoya a las jóvenes promesas, el que da tranquilidad, seguridad, orden y ejerce un verdadero liderazgo en la cancha y fuera de ella.
Como reflexión, y llevando esto al mundo empresarial, las organizaciones deberían apostar por profesionales con experiencia, que enseñen de los errores que pudieron haber cometido a jóvenes que están saliendo al mercado laboral.
Al final, al ver el mercado laboral y compararlo con este partido de futbol, el de mayor experiencia fue el que estuvo todo el tiempo defendiendo y apoyando a su equipo, y no solicitando cambio antes de terminar el primer tiempo, como pasa con muchos jóvenes que no ven el partido completo y se cambian de empleo como si nada importara.
En resumen, los 50 o 60 de hoy son los 30 o 40 de unos años atrás. La edad no es un límite, es experiencia…
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