Las freidoras de aire se han convertido en uno de los electrodomésticos más populares en los últimos años debido a su gran practicidad y por ocupar una cantidad considerablemente menor de aceite. Sin embargo, las redes sociales han sido inundadas de información alarmista sobre este tipo de productos, asegurando una supuesta relación con el cáncer, ya que supuestamente ayudarían a la formación de acrilamida.

El Dr. Luis Salazar, gastroenterólogo de Clínica INDISA, ayuda a dilucidar la verdad detrás de estos rumores y por qué no es necesario deshacerse de un electrodoméstico tan útil y versátil.

¿Qué es realmente la acrilamida? Es un compuesto que aparece cuando se cocinan alimentos ricos en carbohidratos a temperaturas superiores a 120°C. Se produce durante la reacción de Maillard, el mismo proceso que da ese delicioso color dorado a los alimentos.

“Es importante entender que la formación de acrilamida no es exclusiva de las freidoras de aire”, aclara el Dr. Salazar. Este compuesto químico se forma naturalmente en cualquier método de cocción que involucre altas temperaturas, sea un horno convencional, un sartén o incluso un microondas

Contrario a los rumores, las freidoras de aire pueden ser parte de una cocina saludable cuando se usan correctamente. De hecho, el Dr. Luis Salazar señala que “estos electrodomésticos pueden ser una opción más saludable que la fritura tradicional, ya que requieren menos aceite y permiten un mejor control de la temperatura”.

En la misma línea, el especialista enfatiza que las freidoras de aire no son más peligrosas que otros métodos de cocción. La clave está en el uso adecuado y en el mantenimiento correcto. Como señala, “no es el electrodoméstico en sí, sino cómo lo usamos lo que hace la diferencia”.

Apoyada en lo señalado por el gastroenterólogo de Clínica INDISA, la gerenta de productos HA de Midea Chile, Elizabeth Arancibia, entrega algunas recomendaciones de cómo usar correctamente la freidora de aire: