Comienza marzo y con ello se vuelve a retomar las actividades habituales, como el trabajo, los estudios o cualquiera otra rutina.

Durante las vacaciones es normal mantenerse inactivo por unos meses por lo que lo ideal es tener una rutina apropiada para volver al entrenamiento de una manera segura y sin lesiones.

“El primer paso siempre es el más difícil, pero si ya te decidiste y quieres retomar tu rutina de ejercicios, es importante ser paciente en esta fase de adaptación y comenzar con una intensidad moderada para evitar lesiones”, explica Diego Caruezo, Gerente de Operaciones de Smart Fit.

Con metas y objetivos claros y un asesoramiento profesional, será más sencillo que te habitúes y tus músculos se aclimaten para que sin problemas recuperes tu rendimiento. No te preocupes, aquí te daremos algunos consejos para retomar el ejercicio para activar tu cuerpo nuevamente y mantenerlo en el tiempo.

• Metas y objetivos: Cuando entrenamos, ayuda mucho tener un objetivo realista y alcanzable en la mente, “si vuelves al gimnasio queriendo bajar 50 kilos en una semana, claramente no es posible y terminarás frustrándote. Es recomendable asesorarte con un profesional para realizar un nuevo plan de ejercicios que aterrice tus nuevos objetivos y metas”, comenta Caruezo.

Busca algo que te motive y te guste, ya que todo ejercicio es gratificante independiente del que elijas. Eso te permitirá mantenerlo en el tiempo.

• De menos a más: Tómate tu tiempo, no sirve de nada tener prisa. Es mejor la constancia para trabajar esos objetivos y sobre todo disfrutar del ejercicio que se hace. A medida que pase el tiempo, tu cuerpo irá reaccionando de manera positiva, pudiendo cada vez incrementar la intensidad y establecer nuevas metas.
• El ejercicio es un trabajo: “No tengo tiempo para ejercitarme” es una de las excusas más habituales que escuchamos: “hay que cambiar el switch y entender que la actividad física no es una actividad “extra” de nuestro día a día, ni tampoco algo que hacemos en nuestro “tiempo libre””, recalca Diego. El ejercicio debe ser considerado parte del trabajo y es fundamental que seamos capaces de cumplir con ello para ser persistentes y realmente lograr incluirlo en nuestro estilo de vida. Mientras más se internalice, mejor será el progreso.
• No te compares con nadie: Intenta ser positivo y enfócate en tus propios procesos. Si tienes expectativas negativas, generarás emociones negativas en tu interior. El ejercicio apunta a todo lo contrario, liberar el estrés y trabajar la superación personal, fomentando tus propias capacidades y destrezas. ¡No te compares con nadie más!, cada persona tiene su ritmo.