El  cambio de hora que se produce a inicios del otoño puede generar desbalances en los ciclos de sueño de todos los pacientes. Sin embargo, muchas veces son los niños quienes se ven mayormente afectados, presentando trastornos del sueño e incluso problemas de salud. El doctor Roberto Arias, otorrinolaringólogo y especialista en ciclos de sueño de Clínica INDISA, entrega las mejores recomendaciones para cuidar a los niños frente a este cambio de hora.

Síntomas:

• Estados de somnolencia durante el día.
• Desconcentración y apatía.
• Presencia de bruxismo o inquietud durante el sueño.
• Presencia de episodios de sonambulismo o terrores nocturnos.
• Despertar llorando y con pesadillas frecuentes.
• Orinarse en la cama.

“El cambio de hora puede provocar alteraciones en el sueño y en el estado de ánimo de los niños, afectando su rendimiento académico y su comportamiento en general. El reloj biológico de los niños se regula a través de la exposición a la luz, y el cambio de hora puede alterar este proceso. Los más pequeños, en especial los menores de cinco años, son los que más pueden sufrir las consecuencias del cambio de hora”, aseguró el doctor Arias.

Recomendaciones:

• Mantener horarios fijos para ir a dormir y levantarse.
• Exponer a los niños a la luz natural durante el día.
• Reducir el uso de pantallas y dispositivos electrónicos antes de dormir, ya que la luz de estas pantallas puede afectar el sueño y el reloj biológico.

Es de vital importancia que los padres estén atentos a los cambios en el comportamiento y el sueño de sus hijos, y que busquen ayuda si el problema persiste. Los pediatras pueden ayudar a los padres a entender los efectos del cambio de hora y ofrecer herramientas para reducir sus efectos en los niños.