Por Sebastián Gajardo, Country Manager de Apprecio Chile.
Cinco días de celebración pueden provocar la baja en la productividad laboral, porque los colaboradores no estarán totalmente concentrados en sus funciones.
Esta desconexión provocada por una celebración tan extensa puede ser una dificultad al retomar las labores. La motivación con el trabajo y la efectividad de las tareas de cada rol se pueden convertir en desafío después de la celebración de nuestras fiestas patrias
En ese sentido, hay varios factores que pueden ser claves para una reconexión eficaz que permita normalizar los niveles de productividad laboral. Uno de ellos es planificar con anticipación el regreso del equipo de trabajo. Antes de comenzar con las celebraciones, se debe organizar la agenda y establecer prioridades para la semana del regreso. Esto ayudará a que, tanto jefes como colaboradores, se sientan más preparados y menos abrumados.
A eso se suma la revisión del calendario y las tareas pendientes para estar al tanto de los compromisos y plazos importantes. Esto ayudará a retomar las responsabilidades de manera efectiva y así evitar olvidos.
Un segundo factor relevante es dar una reunión de bienvenida al regreso para los colaboradores luego del receso. Esto les permitirá compartir sus experiencias y sentirse valorados por su regreso. Solo en la parte final de la sesión, se puede proporcionar un resumen de los proyectos y tareas pendientes.
En tercer lugar, es clave definir metas alcanzables y realistas para esa primera semana de regreso. Esto te ayudará a mantenerte enfocado al equipo de trabajo y evitar sentirse abrumados por una carga de trabajo excesiva.
El fomentar la colaboración es una cuarte variable importante, ya que se debe animar al equipo a colaborar conjuntamente con la reasignación de tareas o en la resolución de problemas que puedan haber surgido durante los días de vacaciones. En palabras simples, el fomentar la colaboración fortalece la cohesión del equipo y permite abordar los desafíos de manera más efectiva.
Por último, la comunicación abierta y la empatía son clave para una transición exitosa después de estos días de desconexión. Mostrar aprecio por el trabajo del equipo y estar dispuesto a ayudar a resolver cualquier problema que surja contribuirá a fortalecer las relaciones y mantener un ambiente de trabajo positivo.
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