Unas de las complicaciones habituales durante los viajes y las vacaciones son los mareos por movimiento, definido clínicamente como cinetosis. Un problema común en los traslados en auto, tren, avión, y especialmente, en barco.
Belén Navarrete, Directora de Carrera de Fonoaudiología de Universidad de Las Américas Sede Concepción, asegura que “cualquier persona puede sufrir mareos, pero es más común en niños y mujeres embarazadas”.
“Los mareos se caracterizan por el disconfort experimentado por mensajes confusos enviados por el sistema nervioso central sobre la orientación espacial y el movimiento del cuerpo, el cual se manifiesta con una molestia asociada a una sensación de desequilibrio, fatiga, debilidad, dolor de cabeza y palidez, que se puede acompañar de náuseas e incluso vómitos”, explica la académica.
Ante estas incómodas, pero habituales situaciones, la académica de UDLA entrega algunas recomendaciones para que su próximo viaje y el de su familia sea más agradable:
Ventilar y evitar los olores fuertes como aromatizantes.
Previo o durante el viaje consumir r comida liviana y en cantidades acotadas.
Tratar de fijar la vista hacia adelante o hacia afuera por la ventana.
Una buena “técnica” es masticar chicle o chupar algún dulce.
Dormir poco antes del viaje, de tal manera de acumular sueño para descansar la mayor cantidad de tiempo posible en el auto.
Si no es posible dormir durante el viaje, hay que intentar distraerse escuchando música, jugando o contándoles cuentos en el caso de los niños.
El conductor debe evitar los movimientos bruscos y mantener una velocidad constante. Los niños deben evitar cambios rápidos de posición, especialmente de acostado a sentado o giros de un lado al otro.
Es importante viajar por intervalos de tiempo, haciendo paradas para tomar aire, caminar y distraerse.
Evita que los niños lean o naveguen en el celular.
Como padres, siempre debemos estar preparados en el caso que sean los más pequeños quienes sufran de cinetosis, por lo mismo Belén Navarrete, Directora de Carrera de Fonoaudiología de UDLA, aconseja “siempre viajar con bolsas a mano, paños húmedos y líquido para hidratar al niño en caso de mareos y vómitos”. Asimismo, “si el mareo es de inicio agudo y sin una causa clara con signos o síntomas asociados como hormigueos, debilidad o dolor de cabeza, por ejemplo, se aconseja consultar con un especialista”.
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